Christian Libonatti, en Buenos Aires.
(nota publicada en el Portal 180)
El presidente electo uruguayo, José Mujica, tuvo un encuentro con la primera mandataria argentina, Cristina Fernández, en la Casa Rosada. Según contó en conferencia de prensa, acordaron las líneas generales para establecer una agenda de temas importantes y la creación de una comisión negociadora para destrabar el conflicto por la instalación de la pastera Botnia en Fray Bentos.
La reunión comenzó una hora más tarde de lo previsto por retrasos en las actividades de la presidenta. En un clima distendido, la charla de casi una hora giró en torno a la relación entre ambos países. Mujica fue recibido en medio de una cargada agenda de la mandataria argentina, que antes y después del encuentro tuvo actos públicos. Además, el conflicto entre el gobierno y el presidente del Banco Central sigue teniendo episodios políticos y judiciales.
“Acordamos con la señora presidenta establecer una agenda de puntos importantes, que se considerará inmediatamente cuando asumamos la Presidencia”, dijo Mujica. Esta agenda será llevada adelante por una comisión negociadora en la que habrá representantes uruguayos y argentinos. Aseguró que está comisión también servirá para discutir sobre energía, gas, navegación en el río, y hasta problemas existentes en el Mercosur.
Igualmente Mujica no cree que esto sea una solución definitiva. “No pretendemos tocar el cielo con la mano de la noche a la mañana con esta medida, pero pretendemos ir enfrentando esos problemas y tratar de negociarlos con el espíritu más creador posible”. Consideró que si quieren que las condiciones económicas y sociales de Uruguay mejoren, es necesario “pugnar por mejorar las relaciones con el pueblo argentino y con la sociedad en su conjunto”.
Con respecto al conflicto por las pasteras, Mujica dijo que esperan resolverlo pausada y sistemáticamente. “Tenemos que esperar el laudo que va a tener la Corte de La Haya. No tenemos ninguna solución en la mano, tenemos la voluntad de luchar palmo a palmo por encontrar salidas y mejorar en todo lo posible la relación entre nuestros dos países”, afirmó el presidente electo. Aseguró que el objetivo es que no haya contaminación en el río y que no se utilicen sustancias que agredan al medio ambiente.
En declaraciones radiales, Mujica dijo que hay ciertos actores a los que les interesa que siga el conflicto, aunque no especificó a quiénes se refería. También recomendó no caer en chauvinismos, algo a lo que también se refirió como “patrioterismo barato”. Según él, no hay que tomar el diferendo como si fuera un conflicto nacional.
Durante la conferencia, se refirió al supuesto encuentro con los ambientalistas de Gualeguaychú. “Yo no he dicho si me reuní o no me reuní porque tengo palabra con la gente que hablo y tengo muchos amigos en Gualeguaychú, en Río Negro. La palabra que tengo con ellos es que me tengo callar la boca de lo que pude haber hablado o no haber hablado”, señaló el futuro presidente uruguayo. Hace unos días, los propios ambientalistas aseguraron que no había existido ese encuentro, aunque si se habían establecido “contactos informales”.
Mujica se refirió también a la relación entre los pueblos del Río de la Plata. “Argentina debe ser el único lugar donde los uruguayos no sienten que son extranjeros”. Señaló que por eso tenía que agradecerle a la Argentina. “Los uruguayos somos como aquellos animales inteligentes que nunca olvidan donde comen”. Justamente con una parte de los uruguayos residente se reunió el miércoles por la noche. Unos cuarenta militantes frenteamplistas estuvieron charlando con Mujica por más de tres horas. En la mesa hubo variados temas, entre ellos la falta de documentación de miles de residentes.
Previo a la reunión con Cristina, Mujica no tuvo ninguna actividad oficial durante el día. Estuvo descansando en la casa donde se hospeda desde el martes. Se esperaba su retorno a Uruguay para el viernes por la mañana.
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